Pasé este fin de semana
sentada debajo un arce
que acá le dicen el maple
que produce linda sombra
para refrescar con calma
la vida, con el sentido
de pasarla más tranquilos
mirando horas pasar,
conversando con vecinos,
y esperando algún despacho
que nunca quiso llegar.
Las tardes en el verano
te harían sentir mejor
si en la calma de los años
podrías reconocer
cuando sentada a la sombra
de un arce en algún jardín
pensás en las cosas lindas
que te pueden divertir.
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