Cansada,
siempre esperando
En la
puerta de tu casa
Miro las
cosas que hago,
Las que
pienso y que se olvidan,
Las que
me acuerdo llorando,
Las que
escribo repetidas
En
chorreras de palabras
Que producen alegría o
Que producen heridas
Repitiéndolas
cansada
Con aburrimiento pobre
Que las
hace irracionales
En un
mundo enloquecido
Por
experiencias dormidas
Que me
despiertan sin causa,
Sin
versos ni prosa antigua.
El
corazón en la mano
Como lo tuve otras veces,
El
obelisco acá al lado,
Un pie
en el avión prendido
Sin poder evitar irme,
Aunque desgarre mi vida
Llevándome
otra vez lejos,
De mis parientes y amigos.
Un
montón de sensaciones
Que no
sé si organizarlas
En la
lógica encendida
De la
plata entrometida
Que hace falta cada día,
Me llegan por todos lados
En condición familiar
A la triste despedida.