Frases sueltas

 Frases sueltas sin sentido

que me ayudan en la mente

produciendo sentimientos

que ni sabía que tengo

escondidos tan adentro

sin ver lo que no querría

demostrar cuando me acuesto

buscándote todo el tiempo.

Palabras que me persiguen

si me levanto temprano,

contando mis alegrías

cuando me das una mano

siempre y cuando sin pensarlo

me besás en tus abrazos.

Frases de amigo que quiero

cuando te miro sin miedo,

cuando te apoyo en tus sueños 

si los comprendo y entiendo

buscándote todo el tiempo.

Quisiera irme

 A veces que ya me fuí,

otras veces que me quedo

sin irme a ningún lugar,

nadie quiere que me vaya

ni tampoco que te espere,

nadie sabe is es mejor

que una se sienta muy sola

o que camine entre muchos

sin pensar en mi silueta.

A veces si estoy aquí

no creo que esté de veras,

mi cabeza acá no está,

se fue a correr la carrera,

los gatos de los vecinos

pasean en primavera,

los perros que cuando ahullan

atraen a la perrera,

y algún metejón sin sueño

que de mentira me espera.

Corazones de arriba

 Arriba los corazones,

los besos, las emociones,

la alegría del momento,

el calor de los rincones

por donde voy caminando

sin pensar en los bajones

que arrugan los sufrimientos.

Arriba mis sentimientos 

para ponerme contenta,

para vestirme elegante

como yéndome a una fiesta.

Arriba todo lo lindo,

lo delicado, lo fresco,

si te quiero aquí a mi lado

para gozar el momento,

que te ofrezco si me acuerdo

cuando te abrazo sin asco

como me gusta tu cuerpo

y lo que pienso mirando

cuando susurro algún verso.

Se me acabó

 Se me acabó la poesía,

se secó mi corazón, 

ya no rezo, ya no lloro,

la vista se me achicó,

entre paredes de vidrio

con el sol que se durmió.

Me voy llevando una herida

que casi no sangra más,

todo lo que queda duele,

nada se ríe quizás,

palabras a borbotones

saliendo sin esperar

aquel torrente de luz

que pronto se ha de apagar.

 

Me olvidé

 Me olvidé de San Patricio,

el santo que los ingleses

dicen que por ahí

en realidad irlandeses

lo veneran como un santo

que les trae buena suerte,

si te vestís color verde.

Don Particio caminó y

vivió en tierra irlandesa

convirtiendo a los infieles

a la religión eterna

de los cristianos de entonces

por allá en el siglo 7

de la edad casi moderna.

San Patricio transitaba

de pueblo a pueblo 

en Irlanda,

tierra que en aquel momento

se suponía frontera

del mundo que para entonces

era el final de la tierra.

El día de San Patricio

fue la semana pasada.

Por acá se lo celebra

yendo a chupar al boliche

cerveza verde y caliente

hasta quedar tan alegre

que la suerte ya no importa

si te llega o no te llega.

Trozos

 Trozos de la vida 

que se han destrozado,

frío ensortijado

que empuja preplejo,

kilómetros largos

donde no se alcanza

la familia lejos,

porque no se sabe

si la vida es buena

y el bebe despierta

en su cuna hermosa.

Cantos de sirenas

que nadan sin ropa,

que gritan con prisa

trayendo tormentas

que empujan navíos

que van destrozando

en contra las rocas.

El perro que ladra

y el sueño de versos

que en torno se enroscan

haciendo una ronda

de penas sin gloria.

Trozos desgarrados

en toda la historia.

Ventanas

 Ventanas que me cobijan    

cuando me quedo sentada,

cuando te miro llegando,

cuando si estás a mi lado

me gusta mostrar al mundo

que estamos acompañados

uno muy cerca del otro

tomaditos de la mano.

Ventanas que necesito

para mirar hacia afuera,

si es mejor no salir mucho

cuando ese virus se encuentra.

Ventanas que sirven tanto

con sus vidrios transparentes,

que me abrigan cuando pueden

en el invierno que aterra,

que me ventilan a veces

si el tiempo afuera me deja

que las abra despacito

mientras la tierra despierta.

Desperdigados

 Desperdigada por el mundo

en medio de la pandemia,

la gente se esconde triste

para evitar el contagio

sentados en la ventana

mirando el mundo hacia afuera

sin pensar en el camino

que los espera en silencio,

mientras las huellas se ahondan

entre montañas rosadas

con flores de primavera.

Penumbras

 Penumbras fortuitas,

palabras antiguas

que no recordaba

por estar ausente

del habla de España,

tanta gente amiga

viviendo lejana,

la práctica extraña

que a veces me falta

para impresionar

mientras una habla.

Amigo olvidado

que no siempre encuentro,

que iría al velorio

para mi sostén

cuando un ser querido

pasa a mejor vida

y no queda nada

más que una sonrisa

guardada en el alma.

Francia

 Muchos días allá en Francia

cuando de recién casados,

posibles ideas nuevas

de cómo encontrarte bien,

mucha práctica buscando

cómo quererte mejor,

cómo quedarme a tu lado,

cómo practicar francés,

encontrar la vida hermosa

revolviéndome en la cama,

mirando a tus ojos lindos

reflejándome sin paz,

mientras la vida pasaba

cerca de la torre Eiffel.

Paseos por la costa brava

de la Provenza inmortal,

navegando en algún bote

que me asustó hasta gritar

como Radio Buenos Aires

sintiendo las olas altas

en el medio de la mar. 

Un viaje a Italia llevando

el corazón en la mano

sin podernos olvidar

lo lindo que lo pasamos

al irnos a visitar

tu pueblo de nacimiento

y mis amigos de ayer.

Es tan lindo recordarse

de tanto tiempo sin par,

el viaje de aquella beca

cuando la luna de miel.

Belgas

 Los belgas vinieron,

se quedaron poco,

no sé si querían

ponerse a leer

la lengua del Dante

o la de Cervantes

que no han de saber.

Nadie se podría

poner a pensar

que todos nosotros

vamos a escuchar

a estos belgas locos

hablando español.

Quédense nomás,

el sitio es de ustedes

si quieren leerlo

cuando les conviene,

yo así les diría,

no molestrán

si mirar querrían

estas poesías

algo desgarbadas

que escribo en mis ocios

cuando no hago nada.

Un abrazo amigo

a todos los belgas

que visitan esto

si les dan las ganas

comiendo la acelga.

Cocinando

 Cocinando sin problemas,

lo que me parezca hacer,

mayonesa, caramelos,

ensaladas de papel,

postres con arroz con leche,

con ciruelas o con miel,

con canela y con amor,

todo es rico si está hecho

con querer y con pasión.

Panqueques que aprendí a hacer

con mi tía Catalina

en algún amanecer

encontrando las medidas

que todavía recuerdo

40 años después.

Tallarines, minestrones,

estofados de vacío,

niños envueltos, matambres,

cacerolas con ajíes

rellenos de algún mejunje

cubiertos de mantecoso

derretiéndose en el horno

que encontré con las recetas

que imagino deliciosas

al momento de comer,

y alguna rosca de Pascua

con juguetes escondidos 

para endulzar los domingos

con huevos de chocolate

envueltos con mucho brillo.

Cuánto

 Cuánto que te quiero,

te extraño, te añoro,

te canto en la noche

en versos que riman

en el escorbuto 

de palabras viejas

que salen corriendo

cuando las recojo

de mi pensamiento

saliendo a su antojo

corrriendo hacia un cielo

de color muy rojo.

Cuánto que te espero

a que vuelvas pronto,

a que te resignes

a verme de nuevo,

con palabras raras

que amontono loca

mientras que ninguna

me lleve hasta el miedo

de perderte un día

yéndote al camino

que hasta hace muy poco

vivía contigo.

El río corría

 El río corría besando la costa,

sus piedras, sus plantas,

sus flores y patos,

las gansos, las garzas,

sus peces de plata,

de oro y de gracia

formando una ronda

de caos sin miedo,

mientras que sus aguas

pasaban con prisa

por el pueblo lindo

durmiendo en sus casas,

sin pensar en nada

del río pasaba

bajo las canoas

que el agua besaban

siguiendo el destino

de llegar al mar 

llenas de esperanza.

Deseos bonitos

 Quisiera encontrarte pronto

a la vera de mi vida,

darte la mano, ayudarte

para que vivas conmigo

no solamente a mi lado,

también compartiendo altivo

las alegrias y penas

que en la vida has conseguido.

Quisiera verte temprano,

desde muy temprano creo

que sería una ventaja

el verte tan desvestido

que de vergüenza ni atrevo

a pedírtelo de veras

para sentir mi cariño.

Quisiera que me sacaras

a bailar como una chica

que conoce las maneras

de bailar hasta la aurora

si es que me querés de veras.

Pensá en las cosas queridas

que tantas veces vivimos

mientras jugaba a encontrarte

tras las rocas del camino

y me escondía sin miedo

que fuera tan complicado

el juntarme a tu destino.

Compromisos

Compromisos que persiguen

o que son muy perseguidos

todo el tiempo sin motivo,

todo el tiempo alegremente

desde el fondo del abismo,

mientras pienso en mi cabeza

los problemas que resuelve

cumplir un buen compromiso

con gusto y entendimiento.

Compromisos con promesas

que me tomo con desvelo,

integridad, inocencia

y algún metejón perdido

entre montañas de penas,

monumentos ingreídos

y corralones de arena.

Compromisos entre amigas,

entre novios, o vecinos,

que prometen hacer algo

y no siempre se consiguen

si cuando lo prometido

después de un tiempo se olvida.