Antes

 Antes de pensar de pronto

las cosas que escribiré,

empiezo buscando ideas

queriendo encontrarte a vos,

a tus manos, a tu cuerpo,

a tu corazón gentil,

a la paciencia divina

con que me hacés entender

que hay cosas maravillosas

en medio de mi canción

cuando no escribo poemas

al Año Nuevo que llega

con estos  días sin sol.

Ya la Navidad llegó

y se fue por la ventana, 

cuando de pronto pasó

rodeada de mil regalos

que encontraron mi canción.

Vacaciones de alegría

cuando quedamos en casa

contentos por no viajar,

de no pensar en tranvías,

en aviones o en el tren,

todo está tranquilo acá,

no llenamos las valijas,

no hubo necesidad.

Te quiero más que mejor,

mirando mientras se pueda

vivir en cada momento

en la casa con amor.

Oda al administrador

 Este lugar no podría

ni existir ni existiría
si no fuera por trabajo
que el administrador hiciera
todo el tiempo sin parar
para arreglar los renglones,
los errores, los borrones,
los triunfos a borbotones
y el amor en la poesía
de poetas esparcidos
por todos los continentes
que nos hablan español
en rimas emocionantes
todo el tiempo de la vida.

    (De una participación de participar en un poema fusionado en Poemas del Alma)

Acá estoy

 Acá estoy cantando

aunque no tenga vihuela,

ni rosa ni escarapela,

ni piano ni castañuelas.

Acá espero descansar

de tanto entretenimiento,

cantos que largo a los vientos

caminando despacito

para poder entender

la vida que voy llevando

cuando me acuesto tranquila

al costado del camino

buscando una estrella suelta

mirando al cielo infinito.

Besitos que yo te daba

y te quiero seguir dando

día y noche, noche y día,

todos los días del año.

Hoy te estraño

 Hoy te estraño como nunca,

por suerte vos estás bien,

pero el frío en rutas bravas

al zanjón te echó también

como tantos que encontramos

después de alguna tormenta

que los dejaron de a pie.

Volvéte, Alex, volvéte

no te quedes sin volver

esta percanta está sola

mientras tenés que dormir

en una cama lejana

para no pasar la noche

con temperaturas bajas

que tanto te harían mal

cuando no encontrás la grúa 

que te podría ayudar

cómo sacar ese auto

de la zanja comunal.

Te extraño, pibe, te estraño

es triste encontrase sola

sin saber cómo estarás.

Volvéte, pibe, volvéte

no hagas que espere más.

Y lloré

 Lloré y lloré como si nunca fuera

nada mejor en tiempo desraigados,

de amor, de pena, de tristes horizontes

donde la gente buena va llegando

sin freno ni esperanzas apuradas

cayéndose en la sima del olvido

donde no hay más ni pena ni mañana.

Y lloré, lloré por mis hermanos,

por los deseos tristes que a veces aparecen

entre llantos sin fin, tomados de la mano

mientras buscamos como casi adivinando

si valdría la pena volar  alto

sin que nos cuenten las penas del pasado.

Lloré y lloré sin darme cuenta,

nada sabía viviendo en la nostalgia

donde las flores que había ya no crecen,

escondidas detrás de una muralla.

Y lloré desde el fondo de mi alma

por los que se fueron, los que quizás quedaran,

los  que vendrían si es que se animaran

porque no hay mas de vida la abundancia.

Cuadernos anticuados

 Nadie más usa cuadernos

de papeles anticuados,

todos escriben con dedos

definidos y apoyados

con velocidad divina

en teclados ordinarios,

llenos de pixels y ritmo

que se empujan para abajo.

Nadie sabe ni que existan

los cuadernos anticuados,

los chicos tendrán que usarlos

por unos meses al año

hasta que llega el maestro

de alguna computadora

que les podrá demostrar

lo fácil que es escribir

usando máquinas nuevas

con teclados avanzados.

Vaya a saber si algún día

la moda a de gustar

el usar los anticuados

cuadernos cuadriculados

que molestan sin pensarlo

cuando sus hojas traspiran

palabras de diccionario.

Ruidos descomunales

 Como soy una viejita

simpática y muy bonita,
no tengo idea qué es
lo que tanto molestara
al venezolano poeta
que me invita a comentar
los ruidos de sacrilegio
que podría imaginar.
Poeta amigo y hermano
en versos de mi canción,
no sabré de qué se trata
cuando vivo en Canadá
y no escucho algunos ruidos
desde este insolente lugar
que no pasa por la radio
música para escuchar
que no sea en el inglés
o en francés sin comparar
lo que está en ese español
que no se pueden aguantar.
Vaya un abrazo muy fuerte
y una llorada además
para sentirme contrita
de cosas que pasarán
cuando la gente no hace
favores para gozar
melodías más tranquilas
que se puedan aceptar.
Muy linda tu invitación.
que se repita nomás.

    (De una invitación a participar de un poeta fusionado en Poemas del Alma)

Noviembre

 Noviembre acá llegó

en las puntitas de pie,

se escondió por unos días,

se puso a contar de a 10,

y se escapó de mis manos

tan rápido en mi placer

que no sé lo que diría

cuando pienso lo que hacer.

Noviembre sigue caliente,

lamento poder decir,

al vivir en este mundo

aumentando en el sufrir

del calor acumulado

que nos llevará a morir

si no tenemos cuidado

llenando todo el país

con fuegos desperdigados

que nos quieren invadir.

Uno nuevo

 Acá va algún verso nuevo

que ni sé si va a parar

al tacho de la basura

para no mirarlo más

o a un sendero idolatrado

cuando me pongo a pensar

los supiros que creaba

en mis ganas de buscar

tus caricias sacrosantas

si vos querías amar

a esta linda muchachita

que llevaste hasta el altar.

Acá espero en esta silla

delante de una pantalla

para escribir siempre más

si te dignás arrancarte

de tanta conversación

en la fábrica importante

si quisieras olvidar

el visitar a los jefes

que se quedan a escuchar

tus consejos de hombre sabio

todo el tiempo sin parar.

Palabras sueltas al viento

que un velero ha de encontrar

suspirando al extrañarte

para poder navegar.

Todo el tiempo sin parar

Es de noche y es tarde,

el sol se fue para abajo

detrás de nubes viajeras

que lo abrigan sin parar.

Me siento sola a la mesa,

me pregunto si es verdad

que acá la vida se acaba

aunque cueste imaginar

que detrás del horizonte

el sol se no se acuesta nunca

y en algunas horas más

volverá a verse en la aurora

cuando se va a iluminar

a millares de personas

ricas, pobres, malas, buenas,

lindas, feas, locas, sanas

todo el tiempo sin parar,

porque la tierra se hamaca

para poder demostrar

que el planeta da sus vueltas

alrededor del elipse

en su destino espacial.

Me gustás mi vida entera

todo el tiempo sin parar

acá en la tierra en el suelo,

en el aire, en la emoción,

en los días que me esperan

mientras de voy a volar

en el sueño y la nostalgia

todo el tiempo sin parar.

  

Otro cuándo (baile folklórico) que cantaba

 Acá me pongo a cantar

sin pensar si algún pintor

podría escuchar mis notas

para inspirarse mejor

a pintar sobre la tela

caras de orgullo y solaz.

Acá me pongo a llorar

cuando por algo estoy triste

no sabría qué decirte

ni podría realizar

mi vida de inteligente

señora que ha de buscar

excusas para escribir

cuando se pone a cantar.

No hay guitarra en este canto

ni trompeta, ni violín,

nada que pueda escuchar

que haga acompañiamento

cuando me pongo a cantar

ayudando al pensamiento

para que suene mejor.

Besitos que yo te daba

cuando quería cantar

para inspirarme contenta

sin pensar en mi llorar.

Abrazos que siempre espero

cuando te veo llegar,

cantos de lunas y risas

que no podría olvidar.

Aventura extraordinaria

 Esta es toda una aventura

casi casi inesperada,

no sé bien lo que me espera

ni cómo evolucionaron

cosas que mordieron fuerte

cuando el camino bajaba

mientras no podía verse

qué era lo que encontraba.

Las sombras ya no me cuidan,

se entremezclaron tempranas,

escondiendo las semillas

dentro de bolsas marcadas

que sembrarán con amor

en el momento adecuado

para arrojarlas al zurco

en primaveras cercanas.

Otra al sol y al camino

 Otra al sol, otra a la luna,

muchas otras sin motivo

y también sin apellido,

tantas poesías locas

que me llegan por caminos

que no sé dónde me llevan

pero me gustan lo mismo.

Otro poema sin voz,

sin cariño, sin destino

con rimas que salen fácil

a la hora del camino,

mientras me voy por los campos

que veía florecidos

hasta hace ya muy poco

en noches largas de olvido.

Otro poema que siento

cuando me pongo a pensar

las cosas que siempre salen

a la hora del amar.

Espero que a vos te guste

cualquier poema que escribo,

sería muy oprobiante

si cuando ofrezco mis rimas

a tu corazón de piedra

no las veas con pasión

sino como cosa facil

olvidando que te quiero

como siempre enamorada

a la hora del camino.

Esperando por tu amor

 Qué alegría inesperada,

y qué hermoso que es estar
escribiendo algunos versos
en el medio de mi andar,
para seguir los consejos
del poeta que invitó
a escribir algunas frases
declarándote mi amor
cuando te espero sentada
en lugar de vagonear.
Qué alegría esperanzada
cuando me pongo a pensar
cuantas veces que te veo
con mi amor al esperar
que me quieras todo el tiempo
sin que te pueda dejar
después de 60 años
de estar juntos al viajar
por este mundo viviendo
un destino sin igual.
Besitos muy querendones
todo el tiempo si parar.

   (De una invitación a participar de un poema fusionado en Poemas del Alma)

La página negra

 Hace muchos, muchos años

que me decidí expresar

apretando teclas negras

que escribían al compás

de mi corazón alegre

pensando en las rimas lindas

que salían sin parar

puestas en pantallas blancas

cerca la orilla del mar.

Nunca pude imaginarme

que algún día dichas páginas

blancas ya no lo son más

porque mis pantallas, gente,

tienen contrastes oscuros

para escribir en mi mente

con letras blancas y puras

sobre la negra verdad.

Y la luna cabalgaba

 Y la luna cabalgaba

arriba de una montaña,

arriba de lomas de oro,

sobre praderas con pinos,

sobre el mar, el río,

el alma, 

deslizándose en la nada

antes que llegara el alba.

Y la luna se mostraba

llena de paz y de calma,

moviéndose por el cielo

como buscando las hadas

que volaban descuidadas

con aves de plumas blancas

detrás de nubes de plata.

Fotos

 Fotografías antiguas

que miro con embelezo,

con admiración continua,

con amor y mucho celo.

Pilas y pilas de ellas

pegadas en armonía

para verlas cada tanto

en álbumes ordenados

con tantas fotos queridas

amontonando contentos

para recordar por siempre

detalles de muchos viajes

que hiciéramos en familia

en campamentos a bosques 

en canoa, o caminando,

y bañándonos en lagos

haciendo vida tranquila.

Visitando en las ciudades,

monumentos y museos,

castillos llenos de cuentos,

de historias y de silencio.

O cuando el frío llegaba

en la Navidad contenta

nos íbamos a esquiar

cerca de alguna montaña

en lugares adorables

mientras los chicos crecían

poniéndonos los esquíes, 

los patines sobre hielo

o borseguíes enormes

para caminar con frío

en lugares llenos de hadas

misteriosas de blancura

cantando en las noches largas

que inspiraban a jugar

todos juntos en familia.

Pájaros en la cabeza

 Pajaritos en mi cara,

en mi vida, en mis orejas,

que los miro desde cerca,

desde lejos, desde afuera.

Pajaritos que crecieron 

al abrigo de ilusiones

que se fueron derritiendo

poco a poco sin consuelo,

que me acompañan ahora

como habrán acompañado

caricias que a veces tuve

aunque nadie me tocara. 

Besos que a veces pedía

cuando nadie me los daba.

Tener en mi pobre bocho

tantos pajaritos sueltos

es como volar de noche

cuando la noche está loca

mientras las luces del cielo

revolotean sin traba

atrayendo las miradas

de la gente deslumbrada

haciéndose peregrinas

si del polo viven cerca.

Quizás esta noche sea 

una de las noches sueltas

cuando las llamas del sol

se convierten en cadenas

de esplendor en las alturas

para acercarse a la tierra

y podés ver su hermosura

si es que te encontrás despierta.

Y

Y cantaba mis canciones

sin saber lo que escribía,

lo que quería de vos,

de tu boca, de mi rima,

de las poesías feas,

las tranquilas, las bonitas,

las que me escucho por dentro

cuando las voy a largar,

las que me tienen contenta

casi siempre sin parar,

las que me recuerdan tanto

cosas que quiero desear

pero se llegan despacio

cuando no puedo encontrar

una al final del romance

todo el tiempo sin parar.

Y me buscaba una excusa

para poder deletrear

cosas que a veces veía

sin dejarlas de admirar,

mientras me tenían loca

de tanto hablar sin hablar,

cacareando en la montaña

debajo de algún portal

mientras callada no estaba

porque no aguantaba más

buscando con la mirada

libros que a veces leía

deletreando en las hormonas

palabras que no escuchás

cuando el corazón se abre

con ansiedad sin maldad.

 

Para ser mujer

 Quería escribir un verso

galano, fuerte y soltera,

que se dirigiera al mundo
en otoño o primavera,
pero parece paisano
que llegué muy tarde al llano,
la posibilidad hermosa
de escribir una poesía
es acortó sin mucha gracia
y no puedo dedicarle
al poema a ser mujer
más que unas pocas palabras
para encontrar entre amigos
algo que pueda decir
porque así me dan las ganas.

   (De una invitación a participar de un poema fusionado en Poemas del Alma, habiendo llegado medio tarde)

Se me ignora

 Se me ignora, se deplora

cosas raras que pasaban

y también que se escondían

sin que nadie las contara,

porque la chica lloraba

mientras tenía esperanzas

de verse linda de día

aunque todos la miraran.

Se me ignora de repente

a la hora de la cena,

en los grandes aspavientos

de la ópera alla Scala,

cuando en silencio buscaba

una mirada valiente

porque todos me encontraban

mirando el cielo celeste

sin decir una palabra

para hacerme sentir bien

a la hora de la nada.

Besitos que yo te daba

buscando tus manos fuertes

que me abrazaran con ganas

para sentirme contenta

junto con vos en la cama.

    

Disgustos

 Enredados en mi cuerpo

desde el principio del tiempo,

los disgustos se amontonan,

se apilan sobre la mesa,

sobre el corazón dolido,

sobre gente que una extraña

que se fueron ya muy lejos

buscando estrellas tan raras

adornando el alto cielo

que nadie las vio llegar

ni las vio cuando se fueron.

Disgustos que nadie llama,

que aparecen de repente,

que te arruinan la mañana,

la noche, la gente buena

que vivía al lado tuyo

acostada sobre el suelo,

las ilusiones de paz,

de calor, de primavera

bailando sobre los prados

mientras mirás la bandera.

Ojos torcidos

 Ojos torcidos, cansados en tiempo

de la luna llena con todas esas penas

que se van juntando dentro de mi alma

mientras que un ataque arruinó al izquierdo

sin poder saber si lo que no veo

me espera acechando para lastimarme

en cada camino que encuentro en el cielo.

Ojo que se va quedando sin vida

trayéndome historias de cuentos torcidos

sin que importe mucho las cosas que hago

en mi amor por vos que a veces me olvido

si juego soñando de curar heridas

en cada bajada, en cada subida

de la patria triste de la despedida.

Día del Poeta Virtual

 Acá dijo un gran poeta

me pongo a cantar solita.
No va a hacer como Cervantes,
ni el poeta José Hernandez,
no sé cómo acompañarme
con instrumento melódico.
No tengo vihuela a mano,
ni acordeón del Puente Alsina
como cantaban los viejos,
ni piano para tocar,
ni violín en una esquina.
Sólo quiero recordar
a los poetas virtuales
que se unen cada tanto
con invitación solemne
del gran poeta latino
que se llama Hermán Varillas
inspirándonos a todos
para escribir maravillas.
Vamos recorriendo juntos
caminos en el espacio,
entre la luna y el sol,
desde una casa bonita
toda llena con mi amor
para desear a todos
gran poesía en este blog
que nos une con valor
día y noche, noche y día.

    (Copiado de mi participación de un poema fusionado en Poemas del Alma)

Mañana será otro día

Acá empiezo despacito

un poema tan bonito

que dará asco el leerlo

por ser tan simple y tranquilo.

Acá lo escribo, señores

sin darme las muchas vueltas

que doy cuando empiezo un verso

que no sabría jamás

como lo terminaría

sin pensar en muchas penas.

Así me siento y respiro

un poco del aire puro

que encuentro por acá cerca 

cuando la noche está sola

dando a la vida sentido.

Besos que te doy a a vos

todo el tiempo estando vivos,

si no te vas a la cárcel

y si te quedás conmigo.

El invierno va llegando

 El invierno va llegando,

la temperatura baja, 

los pájaros que llegaron

allá lejos en febrero

se están por ir de paseo

hasta climas más benignos

donde harán nidos lindos

y tendrán pichones nuevos

que crecerán por 6 meses

porque volverán volando

con sus padres y sus tíos

como otros años pasados

para anidar en el norte

hasta llegar el verano.

Acá el invierno se acerca

mientras empieza a hacer frío,

veré de poder por siempre

festejar con mi cariño

las estaciones del año

mientras te siento a mi lado

para mi alegría grande

todo el tiempo entre tus brazos.

Recuerdo los tiempos de antes

cuando era fácil ser fuerte

y enfermedades no había

pero el cariño presente,

todo el tiempo enamorados,

sigue siendo como siempre.

La gente

 Por qué la gente me mira,

me provoca, me suspira,

me dice que estoy muy loca

que ni sé lo que se dice,

cuando hago sin paciencia

lo que quiero cuando ríen.

Por qué la gente me ignora,

no me mira ni me mima,

todos se van de repente

hacia el andar de la aurora

mientras los callos del pie

me producen la cosquilla

que no me deja dormir

aunque mi cerebro grite

que me vaya a dormir pronto

y que deje de pensar

en las cosas que no hice

mientras estaba despierta.

Desde la oficina triste

donde estoy haciendo esto 

hasta muy tarde en la tarde

escucho la charla amable

de conversaciones simples

a ver si se vende más

cachibaches increíbles

que fabricamos acá

con espejitos plateados

en lupas de gran tamaño

para mirar lo imposible.

       (Aviso: con esa charla inocente que escuchaba desde mi oficina se vendió algo por más de $90,000)

Vacío

 Vacío está el aire,

el amor, el frío,

el canto al destino,

el olor del vino

que sueña y transpira

lo que yo adivino

cuando desde siempre

encuentro en la vida

cosas tan vacías

que me ponen loca,

triste, irracional,

pensando sin tino

cosas que están mal

porque  no las vivo,

solo las recuerdo

desde el tiempo viejo

cuando el visitar

lugares distintos

era tan normal

que todo se hacía

con mucha soltura

sin pensarlo tanto

porque había fuerza

para caminar,

trabajar, viajar,

suspirar llorando

o reír sin prisa 

mostrando en la vida

que todo se hacía

con felicidad

llena de poesía.

El sol

 El sol se empieza a acostar 

más temprano por la noche

y se nota fácilmente

cuando se llega a septiembre,

los días van acortándose

hacia el final del verano

hasta llegar a diciembre

donde la luz se hace pobre

en la mañana muy tarde

y por la tarde muy pronto.

Al sol lo vemos tristón

con tanto calentamiento,

nos está tostando a todos

hasta adentrarse el invierno,

volviendo hacia la rutina

cada año todo el tiempo.

Quizás no me quieras más

muchachito de aquel tiempo

cuando era fácil llorar

pensando que de repente

te ibas a ir muy lejos

por los campos de la vida

donde el futuro era grande,

era amplio, era decente,

pero en cualquier ocasión

podíamos encontrarnos

en la estación Villa Bosch

charlando animosamente

sentados en el tranvía

tomándolo hasta Lacroze

para llegar con el subte

a la estación de Florida.

. 

Tu ternura en mí

 Tu ternura en mí

me inspira todos los días,
me deleita con pasión,
con dolor, con alegría,
mientras el tiempo que pasa
me hace pensar sin malicia
que la ternura lograda
día y noche, noche y día,
cuando estamos tanto juntos
en las buenas y en las malas
me da fuerzas de flaqueza,
me divierte, me fascina,
me hace sentir tu mirada
entrelazada en la mía
desde hace muchos años
para logro de mi vida.
Cantando tanta ternura
es un don inigualable,
me gusta cantar bajito
al encanto de esta tierra
que me permite añorar
la ternura de mi vida
cuando estoy al lado tuyo
suspirando tus caricias.

    ( Desde la invitación a participar de un poema fusionado en Poemas del Alma)

Arrugada

 Arrugada y extrañando

mi jardín de primavera

paso las noches llorando

buscando las madreselvas

con días que se van yendo

aunque nunca me dé cuenta.

Toda torcida sin asco,

con la columna hecha piedra

canto bajito mi canto

para que escuche el que quiera.

Arrugada y añorando

la juventud que no tengo

por pasar rápidamente

mientras vivía corriendo,

escribo prosas y versos

para sentirme contenta.

Arrugada, abandonada,

rodeada de gente ausente,

paso mis días jugando

a la ronda y la escondida,

al zapateo que bailo

con botas muy anodinas

mientras me acuerdo de vos

con caricias que adivino

que me darías sin asco

si pudiéramos decirlo.

Lo único

 Lo único que queda son mis ojos

celestes y tristones como pocos

que sueñan sin saber lo que les pasa,

que viven o se mueren uno a uno,

que ayudan mi destino en la jornada

y cantan a la vida emancipada

bailando sobre el agua en la pileta,

llorando sin consuelo cuando pierden

amigos y canciones en la nada.

Lo único que queda son mis ojos

llorando sin consuelo en la partida

con besos que se soplan a lo lejos

y alcanzan a las metas arrobadas

de amigos jugando a la ruleta,

con nidos de pájaros azules,

amarillos o verdes o violeta,

que esperan que me siente en mi ventana

para volar hasta una rama cerca

sin voz, sin corazón, sin flor, sin nada,

hamacándose tranquilos sobre el agua

adorando de pronto a la bandera.

Todo está

 Todo está podrido,

cansado, aburrido,

todo está torcido,

sin pie ni cabeza

en el remolino

de vientos que llegan

cantando sin miedo

pocas cosas buenas

que van por el campo

mientras me da sueño

escuchar torrmentas

con truenos que traen

lluvias a torrentes

que inundan de pronto

al pueblo que pudren

con rayos de fuego

y gusanos muertos.

A Inés y Patrick

 Vinieron a vsitarnos

desde Corea de Maine

del estado americano

pasando por Montreal

al lado del San Lorenzo

bajando para Toronto

en una ruta infernal

que les llevó muchas horas

para poder encontrar

a esta prima que los quiere

con ganas para charlar

toda la noche si vieran

que haría falta el hablar.

Y llegaron por el campo

si no pudieron usar

alguna calle cerrada

que los hizo dar mil vueltas

siempre en el mismo lugar.

Caras amigas que llegan

desde el fondo de la mar

con millas y con kilómetros

para perderse nomás.

Me querías nívea

 Allá lejos y hace mucho

pagué con toda mi alma
el darme a vos con cariño
mientras mi vida pasaba
escondida en los rincones
de la sociedad cristiana.
Allá lejos y hace mucho
te entregué toda mi alma,
todo mi ser sin tapujos,
para iniciar una vida
donde dejé unos jirones
de piel y carne arruinada
mientras lloraba con calma
traiciones que me robaron
tranquilidad en la nostalgia.
Fue muy bueno ser tan blanca
como la nieve de plata,
pero no es cierto que sirva
para sentir en mi alma
que una pueda sin problemas
verse bien acompañada.
Hubiera sido mejor
que experiencia en esta vida
jugando como ruleta
me dejara la impresión
de experimentos sin traba
que calentaran con tiempo
la candidez de mi alma.

      (Producido como invitación a participar de un poema fusionado en Poemas del Alma)

Inspiración de princesa

 Supongo que si yo soy

tu inspiración pasajera
que fluye dentro tus venas
y me despierta en la pena
que no sos mi inspiración
porque acá yo soy la nena,
también podría decir
noche y día todo el tiempo
que mi inspiración divina
es estar al lado tuyo
cada vez que yo pueda
mientras me quieras de veras
cuando te adoro contenta.

   (De la participación a un poema fusionade en Poemas del Alma)

Pajaritos

 Los pajaritos se han ido

las ardillas se esfumaron,

los besos que ayer nos dimos

poco y nada me han quedado,

todo suena tenebroso

después de una noche linda

donde en el calor humano

de verte cerca y hermoso

enredada entre tus brazos,

me sentí en la misma gloria

de tantos días pasados.

Te quiero Alejandro viejo

como quise sin tapujos

al Alejandro de joven

que me quiso entre sus brazos.

Memorias sueltas

 Después de todos estos años

esperando alguna causa

para escribir con provecho

lo que  me inspire de pronto

a promoverla sin pausa

al través de versos sueltos,

todavía no sabría

cómo probarme a mí misma

que la causa es importante,

que tenemos esperanzas

que el mundo mejore a veces

aunque las guerras den plata

a unos pocos poderosos

que empujan conflicto armado

para probar que es difícil

vivir en paz en tu casa.

Pensemos mientras podamos

en ayudar sin mirar

qué color tiene la piel 

de las personas que llegan

si es que se fueron con prisa

huyendo de sus países

para llegar a estas tierras

a comenzar una vida

con causas ilimitadas

consiguiendo en armonía

que todos tengan un techo,

un vecino, una comida,

un trabajo honrado y bueno

para ayudar a los otros

que vendrán más adelante.

Poema a las corridas

Escribiré una poesía

aunque me cueste la vida,

aunque me vaya temprano,

aunque de nada me sirva.

La escribiré de costado,

de sentada, de rodillas,

desde el fondo de mi alma

y desde allá más arriba

de la colina más alta

cuando me sienta tranquila.

Siempre que te espero canto

con las fuerzas que me quedan,

con las que llevo en la mano,

con las que tengo de veras

en lo mejor del verano

caminado sobre huellas

que dejaron los paisanos

de la patria tan lejana

a la que quizás no vuelva. 

La escribiré mientras corro

aunque me cueste la vida.

Otra vez acá sentada

 Sentada cerca de vos,

sin pensar, sin dar mi voz,

cantando sin darme cuenta

que me quedo sin remedio

en  medio de la victrola

alrededor de algún disco

cuando ya no tengo sueño.

Canciones que cantaría

si me dieran muchas ganas,

por ahora no las canto,

quizás las cante mañana

cuando la luna se asome

y las estrellas extrañas

bailarán alguna cueca,

sin querer que ahí se vea

la falta de inspiración 

que tengo si no estás cerca.

Siempre igual

 Siempre igual,

nunca despacio

respirando sin pensar,

sin verte, sin obligarte

a pensar en tu comida,

tu diversión maldita,

tus desplantes sin permiso,

tus amores a escondidas,

tus besos que voy pidiendo

todo el tiempo sin medida.

Siempre igual,

nada se cambia,

la luna está en la montaña,

el sol se va despacito

y mi vida acá en mi mano

nunca se vé dónde queda,

mientras la cama está sola,

nadie la calienta apenas

y me voy a dormir toda

sin pensar en compañía

porque la vida se alarga

debajo de la cortina

que esconde los platos sucios

que no se lavaron antes

y las hormigas se comen

las sobras que ahí se quedan.

Arriba los corazones

 Arriba los corazones,

aceitunas y amapolas,

campos llenos de sardinas

en las lagunas torcidas

que el agua por acá trae

cuando llueve todo el tiempo

sin que aparezca respiro,

y el sol se queda en la tarde

para alumbrar sin quererlo

cosas que nadie repite

si no quiere darse bronca.

Cantos de ángles cantan

cancioens que nunca llegan,

se quedan en la vereda

y no se animan con nada

mientras la luna se acuna,

el sapo en el charco salta,

la rana busca un besito,

un dolor, una alcancía

que juegue con los colores

de melones y sandías.